Un antiguo arte tibetano redescubierto en Japón en el que la energía vital del Universo se canaliza a través de la imposición de manos. Armoniza todo el cuerpo equilibrando los chakras, eliminando los bloqueos físicos, emocionales y energéticos, favoreciendo la relajación y el equilibrio de los cuerpos físico, mental, emocional y astral.